Apr. 13—OPINIÓN Y COMENTARIO
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"Dictador de mi corazón".
Ah, el amor. Se puede usar o abusar con fines políticos nefastos. Así lo han demostrado el opresor a cargo de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y la mujer que profesa adorarlo, su esposa Lis Cuesta.
En un esfuerzo por limpiar la imagen de matón de Díaz-Canel —después de que aplastara brutalmente las históricas y pacíficas protestas en julio y ordenara a los cubanos luchar entre sí para defender su régimen— la pareja se entretiene sosteniendo cursis demostraciones públicas de afecto en Twitter.
El domingo por la mañana, sin embargo, la fiesta del amor fracasó cuando el intento de Cuesta de halagar a su hombre fuerte salió mal. Llamó a Díaz-Canel en un tuit lo que es: un dictador.
"El que es lindo lo es! Y, además, por dentro y por fuera: el dictador de mi corazón", Cuesta tuiteó.
Agregó emojis de corazón pulsante para despejar cualquier duda.
El mundo de Twitter se volvió loco.
Dictador enamorado
El, reciprocando, tuiteó desde su cuenta dos líneas de una canción de Silvio Rodríguez, uno de los trovadores populares en los años 70 que se mantienen fieles al régimen: "Te amaré hasta el fin de los tiempos. Te amaré y después te amaré."
El estómago se revuelve.
Pero su conversación pública de almohada — pura propaganda — fracasó.
Se convirtió instantáneamente en furor, extendiéndose a otras redes sociales a medida que los observadores de Cuba, los cubanos en la isla y los dispersos por todo el mundo después de décadas de exilio intervinieron con bromas sexuales y recordatorios de los actos de represión de Díaz-Canel.
La gente usó una mezcla de humor, ironía e indignación para exponer la hipocresía de la pareja, su desconexión de la realidad cubana en las calles y el despiadado mandato de este heredero de los Castro.
"Esta debe ser la primera vez en 60 años que ustedes dicen algo que represente el pensamiento del pueblo cubano," respondió el activista de derechos humanos Agustín Antonetti. "Estamos todos de acuerdo, es el dictador tuyo y de once millones de cubanos más."
A lo que otro activista, Pedro Victor, agregó: "Menos en lo de lindo, ahí mintió como siempre."
Una tendencia en Cuba
La palabra "dictador" comenzó a ser tendencia en Cuba —se usó 21,000 veces solo el domingo, según una captura de pantalla— y la etiqueta #EnCubaHayUnaDictadura tuvo una buena racha.
Las bromas seguían siendo fuertes el martes.
Los memes de ambos lados no tienen precio.
Los de cubanos castristas llamados a defender a su primera dama y "presidente" enamorado, parecen promos de telenovela y suenan a afirmaciones de autoayuda sobre el valor del amor, mucho amor, como diría el difunto astrólogo Walter Mercado con estilo (hay que reírse caballero, no queda de otra).
De las personas oprimidas y exiliadas, los memes representan escenas de cama caricaturescas entre la pareja, diálogos hilarantes entre los amantes inventados, Fidel Castro opinando desde la tumba e imágenes retocadas de Díaz-Canel en compañía de hombres homosexuales.
Publicaciones serias en respuesta a los tortolitos contienen información sobre las mujeres cubanas arrestadas el domingo en una iglesia en Holguín, la esposa y las hermanas del manifestante encarcelado el 11 de julio Maikel Rodríguez. Otros publicaron en el hilo de Cuesta fotos de Associated Press de la respuesta violenta del gobierno a las protestas.
Lo mejor de todo es que las babosadas de la primera dama y su respuesta inadecuada a las críticas atrajeron una nueva y muy necesaria atención a las duras sentencias de prisión que el gobierno de Díaz-Canel está imponiendo a cientos de jóvenes por protestar contra políticas como su ley de censura del arte.
Jóvenes de hasta 16 años que salieron a las calles a protestar continúan detenidos.
"Dice Lis Cuesta que 'nos molesta su amor'... señora nos molestan los presos políticos, la miseria, el éxodo y la falta de libertades... su amor es tremendamente irrelevante," tuiteó el activista de derechos humanos Jorge Castro.
Ya era hora de que los buenos de la historia de disidencia en Cuba le dieran otro golpe a un régimen que encarcela y exilia a líderes disidentes y facilita un nuevo éxodo para deshacerse de la oposición interna.
Para el martes por la tarde, ya el aparato cubano había desenterrado sus múltiples y predecibles herramientas de propaganda para ahogar las críticas inteligentes: Fidel muerto izando una bandera en un lugar histórico, llamados al fin del embargo, etc.
Pero no pudieron ahogar las etiquetas: #AbajoLaDictadura #LibertadParaLosPresosPoliticos y #SOSCuba entre otros.
Romanticismo en Twitter a lo cubano
Por supuesto que al problema de imagen de Díaz-Canel no le sirvió de nada el derroche de romanticismo en Twitter. La cursilería solo se transformó en un refrito de su gobierno antidemocrático y los crímenes contra su pueblo.
En lugar de ganarse el afecto de los cubanos con apertura y reformas, el hombre fuerte encargado de suceder a los infames hermanos Castro ha desarrollado un poderoso problema de "branding" (su sello), todo obra suya y bien merecida.
Es el blanco de las críticas, que llegan incluso desde la izquierda de Cuba.
Para solucionarlo, tendrá que hacer algo más que mantener un romance con su esposa en Twitter.
