FORT LAUDERDALE, Fla. -- Eran poco después de las 8 pm del viernes. La música retumbaba en los clubes, los trabajadores barrieron las aceras y los porteros tomaron posiciones en las puertas de entrada mientras se preparaban para la multitud del fin de semana de las vacaciones de primavera.
Todavía era demasiado pronto para que muchos estudiantes universitarios se dirigieran de la playa al centro de la ciudad. No comenzaría a estar ocupado hasta alrededor de las 10 pm.
Para John Glover, era el momento perfecto para salir a la calle. El coordinador de programas de especialidad en South Florida Wellness Network lideraría un grupo de otros 13, repartiendo naloxona, un antídoto para sobredosis. ¿Su meta? Empoderar a las personas para que puedan revertir las sobredosis y salvar vidas.
Los miembros del personal y los voluntarios de South Florida Wellness Network, muchos de ellos en recuperación, pasaron el fin de semana hablando con vacacionistas, informándoles sobre el peligro y la prevalencia del fentanilo, un opioide sintético que a menudo se mezcla con heroína, cocaína o metanfetamina y que es muy potente y potencialmente mortal.
“Lo que hacemos esta noche es crear conciencia en la comunidad sobre lo que sucede cuando se trata de cocaína mezclada con fentanilo, brindándoles folletos que tienen información para decirles que intenten probar su suministro primero antes de consumirlo todo”, dijo Glover, de 43 años.
El grupo entrega cientos de kits de naloxona por mes desde que comenzaron en 2018. Su equipo habla con los fiesteros, porteros y gerentes de bares para educarlos sobre cómo es una sobredosis y cómo pueden ayudar hasta que lleguen los paramédicos.
El grupo distribuye naloxona con regularidad, pero intensificó sus esfuerzos en Fort Lauderdale debido a las recientes sobredosis allí.
Saben que no podrán impedir que la gente compre o tome drogas, por lo que quieren ayudar a preparar al público para responder a una sobredosis que pueda ocurrir en una fiesta, club o en cualquier otro lugar.
El grupo se puso camisas a juego que decían en la espalda: "Prueba tu suministro antes de drogarte", así como cuentas al estilo Mardi Gras y pulseras de neón intermitente para llamar la atención.
La mayoría de los jóvenes a los que se acercaron estaban abiertos a hablar, y muchos se marcharon con un volante y una botella de spray nasal de Narcan, una marca de un dispositivo que administra naloxona.
Gage Ertel estaba visitando Fort Lauderdale desde el sureste de Indiana para las vacaciones de primavera. El ex jugador de fútbol de la escuela secundaria tenía hombros anchos que sobresalían de una camiseta sin mangas y estaba en el centro con un amigo. Todavía escuchó a Glover durante unos 10 minutos frente al club nocturno de Capone y recibió una botella de naloxona.
“Conozco a algunas personas que se han metido esa [improperio]”, dijo. “¿Sabes lo que está pasando aquí? Hace una semana, escuchamos que algunos niños sufrieron [sobredosis] de fentanilo, por lo que nunca se sabe lo que está pasando”.
Se refería a la sobredosis ampliamente difundida de seis estudiantes universitarios durante las vacaciones de primavera en Wilton Manors el viernes anterior.
Solo dos días después, cuatro personas más fueron hospitalizadas por sobredosis de fentanilo en la zona no incorporada de Fort Lauderdale.
“Aparentemente ha habido mucho fentanilo”, dijo Christian Cruz, un vacacionista de Milwaukee. “Es genial que nos hayan informado al respecto y que estén haciendo esto”.
“Voy a mantenerlo conmigo, por si acaso. Le pido a Dios que no tenga que usarlo”, dijo el joven de 22 años. “Es mejor tenerlo y no necesitarlo, que necesitarlo y no tenerlo.”
Los funcionarios de salud, los socorristas y los activistas contra el abuso de sustancias han estado haciendo sonar la alarma sobre el fentanilo durante años. La droga es unas 50 veces más fuerte que la heroína.
Los kits de prueba se clasifican como parafernalia de drogas en Florida. Los legisladores demócratas recientemente buscaron cambiar eso. Algunos incluso citaron las recientes sobredosis en su alegato.
Sin embargo, los republicanos en la Cámara estatal bloquearon el esfuerzo y fracasó.
De vuelta en Fort Lauderdale, a 450 millas del Capitolio estatal, los jóvenes inundaron el centro de la ciudad mientras Glover y su equipo continuaban con sus esfuerzos.
Al final de la noche, distribuyeron más de 350 botellas de Narcan, dijo.
Su grupo estará recorriendo lugares de moda desde Deerfield Beach hasta Dania Beach y cuando terminen las vacaciones de primavera, continuarán sus esfuerzos en festivales de música y vecindarios.
Dijo que las historias de sobredosis le descorazonan: “Ese podría haber sido yo, porque soy una persona en recuperación. Y viví ese estilo de vida. Y es desafortunado, porque esa es la hija o el hijo o la madre y el padre de alguien, y no tiene por qué ser así”.
Pero continúa su trabajo para las historias de éxito. Se les pide a aquellos que reciben Narcan que llamen a la organización después de haberlo usado para proporcionar información y obtener un suministro de reemplazo. Eso ayuda al grupo a recopilar datos, pero también le recuerda a Glover y a su personal el impacto que pueden tener.
“Simplemente me da más motivación para hacer lo que hago. Puedo ver a esas personas en la comunidad con sus familias restauradas”, dijo. “Cuando recibimos esas llamadas telefónicas, estamos muy contentos de que nos llamen y salimos, les daremos otra dosis y veremos si la persona está lista para recuperarse o desintoxicarse. Es más energía para mí hacer lo que hago”.
Para obtener más información sobre cómo recibir Narcan, llame al 954-234-2177.
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